Coeducación

La Igualdad Se Cuenta

La Igualdad se Cuenta es un proyecto que hemos llevado a cabo desde el AMPA, subvencionado en el año 2010 por la Consejería de Educación y ganador del Premio Extraordinario a la Actividad Educativa que mejor promociona la Igualdad entre Mujeres y Hombres; premio otorgado en el 2011 por el Instituto de la Mujer en el XI Concurso de CEAPA. Uno de sus objetivos principales es concienciar a padres y madres del importante papel que tienen como educadores/as en la consecución de la igualdad real entre mujeres y  hombres.

(Lee el libro en Formato Pdf)

¿Qué es coeducación? Es una forma de educar basada en la Igualdad, la Paz, y la Justicia como fundamentales para corregir el sexismo y reducir las desigualdades entre niñas y niños, mujeres y hombres. Se trata de facilitar a los niños y niñas que se desarrollen más plenamente, no hay comportamientos, actividades, juegos que sean “de niñas” ni de “ni niños”, cada uno/a puede y tiene derecho a hacer cualquier cosa sin verse predeterminados por su sexo. 

Hay que tener claro que igualdad no significa ser idénticos, el problema no es la diferencia sino la discriminación injusta.

Los cuentos tienen un papel muy importante en el aprendizaje de nuestros hijos e hijas. 

Pero, ¿nos paramos a pensar que mensajes  transmiten? ¿Que modelo de hombre y mujer ofrecen? ¿Cómo influyen en el desarrollo de los niños y niñas? ¿Qué consecuencias puede tener todo esto? ¿Qué ocurre cuando un niño o una niña no se comporta tal y como se espera de acuerdo a su sexo? (por ejemplo, que un niño prefiera la danza al fútbol o una niña prefiera jugar con coches que con muñecas? ¿Cómo reacciona el grupo de iguales? ¿Cómo puede sentirse él/ella? ¿Qué relación tiene todo esto con la igualdad/desigualdad de oportunidades entre mujeres y hombres?.

Estas cuestiones y otras más son las que nos planteamos en el Taller “¿Quieres Contar un Cuento?” que hicimos durante el curso 2009-2010 y 2010 - 2011. El primer año participaron 9 madres y el segundo año 8 madres y 3 padres y ha tenido una duración de  6 sesiones (y otras más que hemos ido añadiendo después).   Empezamos mirando para adentro,  a nosotros/as mismos/as, para tomar consciencia de nuestras propias presiones/limitaciones por el hecho de ser hombre o mujer y de cómo nos afectan. Así, ha sido más fácil tener claro que queremos contar cuentos que no limiten: que los personajes femeninos puedan expresar sentimientos y los masculinos puedan llorar. Que no  transmitan que ser mujer implique tener que ser dependiente,  insegura o pasiva ni que los hombres tengan que ser siempre héroes, valientes y fuertes.

Finalmente, hemos ido al cole, nos hemos repartido por todas las clases, hemos contado cuentos y hemos hecho actividades con los niños y niñas. Algunos  son cuentos que ya existen, otros transformados, otros inventados (porque algún padre y alguna madre se lanzó a crear su propio cuento…), pero todos tienen algo en común: son cuentos que dan libertad para ser todo lo que soñemos, sin sentir obstáculos por el hecho de ser hombre o mujer. 

Finalmente hemos plasmado todo el trabajo (cuentos, actividades, incluso ilustraciones hechas por los niños y niñas) en un libro, material didáctico que está disponible para padres, madres, profesorado y quien crea que pueda resultarle útil.

Los gastos de editar este material es lo que está subvencionado, puesto que todo lo demás ha sido realizado por padres y madres voluntarios/as, que se han implicado muchísimo y han dado aún más.

Ha sido una experiencia muy, muy bonita, el taller ha sido un espacio en el que padres y madres hemos compartido, aprendido, reflexionado… y también, por supuesto, el haber participado en las clases de nuestros hijos/as ha sido una experiencia muy enriquecedora. Me ha encantado.

Una vez un grupo de padres y madres que querían contar un cuento.  

Así que un día dejaron los “no puedo”, cogieron una mochila llena de “ganas”, se sentaron en una alfombra mágica, se pusieron unas gafas para ver todo mejor, se dieron las manos y se relajaron.

Y así viajaron a través de los cuentos: leyeron, pensaron, se dieron cuenta, sintieron, cambiaron, crearon…hasta que encontraron los cuentos que Erase querían contar. No fue una tarea fácil, pues no pensaban contar un cuento cualquiera…
Y llegó el día en que llegaron a un colegio que tenía las puertas abiertas DE PAR EN PAR y entraron, se repartieron por las aulas con ilusión, nervios, ganas, intención…y contaron, hablaron, escucharon, hicieron pensar y pensaron, compartieron, rieron, bailaron, se abrazaron…

Las niñas y los niños van construyéndose como mujeres y hombres teniendo en cuenta  modelos y referentes que somos sus madres y padres, otras mujeres y hombres de su familia, vecinos/as, de lo que ven en las películas… y por supuesto de los personajes de los cuentos.

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